Cuando os dije que este verano había salido muy portugués, no mentía.
Pongo el broche final al verano con este post sobre nuestro viaje a Madeira, un roadtrip de una semana por la isla lusa. Como anticipio, después de un verano estupendo, viene un comienzo de otoño que promete (y mucho), con un gran viaje que hace años está en mi bucket list, así que seguidme para no perderos nada.
Voy a estructurar el post sobre Madeira en base a nuestro itinerario, para daros toda la información de la forma más detallada posible. Estuvimos en la isla un total de seis noches, que dividimos en tres zonas distintas de la isla.
Para recorrerla con calma, a nuestro ritmo y llegar hasta los últimos rincones, optamos por alquilar un coche (sabéis que es mi opción preferida) con Move Rent a Car. El servicio fue sencillamente increíble, nos estaban esperando en la zona de llegadas del aeropuerto, tuvimos un coche tipo SUV (imprescindible, no hubiéramos podido acceder a algunas zonas de la isla con otro tipo de coche), muy nuevo y todo el equipo fue muy amable (nos dieron muchas recomendaciones sobre la isla). Como siempre, os recomiendo contratar un seguro a todo riesgo, para disfrutar vuestros viajes con total libertad! En el momento de partir, dejamos nuevamente nuestro coche en el aeropuerto donde el equipo de Move Rent a Car lo recogió (además nos dieron todas las facilidades también para la devolución), si volvemos sin duda repetiríamos con ellos.
ITINERARIO UNA SEMANA EN MADEIRA
DÍA UNO
Nuestras dos primeras noches en la isla las pasamos en la zona norte, llegamos muy temprano por la mañana, y tras reponernos un poco comenzamos nuestra aventura portuguesa visitando Seixal, Porto Moniz (con sus piscinas naturales), la casacada del velo de novia y Ribeira Janela.
Las piscinas naturales tienen un coste de tres euros por adulto, en el interior encontraréis duchas y vestuarios, el agua está fría, pero tampoco exageradamente, hay bastantes pececillos y un rompeolas de lo más divertido!
En Seixal encontramos por casualidad un lugar para comer, de gran calidad y mejores vistas llamado Praia da Laje. Para cenar hicimos una parada en la localidad de San Vicente.
DÍA DOS
Recorrimos toda la zona oriental de la isla, empezando por la zona más alejada, Caniço, llegando hasta la Punta de San Lorenzo, un lugar verdaderamente recomendable, acantilados rojizos y preciosas vistas sobre el mar. Porto da Cruz, mirador de Guindaste y de ahí a nuestra siguiente parada, una de las estampas más icónicas de Madeira, las casas tradicionales de Santana. Este día no tuvimos demasiada suerte con el tiempo, y aunque nos adentramos en la Levada del Caldeirao Verde por la hora y el clima, no pudimos recorrer la misma.
DÍA TRES
Este día madrugamos para hacer la primera ruta por la naturaleza del viaje. Subimos al pico Ruivo (el más alto de Madeira), en nuestro caso condujimos hasta Achada do Teixeira, desde ahí el recorrido es lineal, entre la ida y vuelta son algo menos de 6km. No es una ruta excesivamente dura, aunque tiene zonas de bastante subida y bajada, lo más «molesto» es el clima, generalmente bastante brumoso, con viento e incluso algo de lluvia a ratos. Por suerte al llegar el pico la niebla se disipó por momentos y pudimos contemplar las increíbles vistas.
A la hora de comer ya estábamos de vuelta al coche y pusimos rumbo a Funchal, donde pasamos las dos siguientes noches. Ese día por la tarde aprovechamos para pasear Funchal sin prisa, dejándonos sorprender por sus calles y su arte callejero.
DÍA CUATRO
Nos despertamos sin prisa, ya que la noche anterior habíamos estado disfrutando de la fiesta madeirense, además de haber subido al pico más alto de la isla y dedicamos la primera mitad del día a visitar los lugares pendientes en Funchal. No podéis perderos el café Ritz, el mercado, las plazas del casco antiguo, las calles llenas de street art y la fortaleza (si es al anochecer, mejor).
Después de comer condujimos hasta el mirador de la Faja dos Padres, donde descendimos por una impresionante ladera en cable car. Abajo una enorme plantación platanera y la playa, fue una excursión de lo más divertida. Desde aquí seguimos hasta Ponta do Sol y, siguiendo la antigua carretera E31 llegamos a una de las cascadas más famosas de la isla, una que cae sobre la carretera y empapa a los coches (y personas) que se atrevan a cruzarla.
Volvimos a Funchal para comprar algunos souvenirs, cenar y visitar el casino de Madeira (si os sobra tiempo la entrada es gratuita, aunque tampoco tiene nada reseñable, y el personal no fue demasiado amable con nosotras, la verdad).
DÍA CINCO
La segunda ruta que decidimos hacer en nuestro viaje a Madeira fue un trozo de la ruta Reina (o pico to pico), se trata de una ruta que une dos de los picos más altos de la isla, el Ruivo con el Areiro. Hasta el pico Areiro «se puede llegar en coche» (esta es la teoría, aunque por afluencia de gente, o para visitas de sendenristas tendréis que aparcar unos 800 m antes de llegar -que tendréis que subir y luego bajar- que tendréis que añadir al recorrido. La ruta Reina es bastante más exigente, también lineal, y de algo más de 11 km entre ida y vuelta. Nosotras optamos por caminar unos 2km, concretamente hasta el mirador de Pedro Rija (veréis un cartel), esta zona es conocida porque hay unas escaleras sobre una ladera estrecha, que hace simular que estes caminando entre nubes (especialmente si tienes un drone).
Una vez finalizamos la excursión pusimos rumbo a nuestro último hotel, en la zona de Cámara de Lobos, el Hotel Bio Quinta da Serra. Se trata de un hotel en un alto, con unas vistas preciosas sobre el mar y la bahía, un remanso de paz que nos sirvió para recargar pilas las últimas dos noches. La tarde que llegamos decidimos quedarnos disfrutando del hotel, de las vistas, la piscina interior con su jacuzzi, zona de sauna… también tienen gimnasio y una zona de hamacas exterior. Nos invitaron a una bebida de cortesía y (como no podía ser de otro modo), mi parte favorita fue el desayuno, super variado, con muchísima calidad y unas vistas maravillosas.
Después de reponer energías en Quinta da Serra, fuimos al mirador del Cabo Girao (la entrada cuesta 2 euros y cierra – al menos en esta época del año – a las 20:00 h). Se trata de un mirador de cristal a 580 metros sobre el mar. Cenamos en Cámara de Lobos y aprovechamos a disfrutar de su ambiente nocturno, que nos gustó bastante más que el diurno.
DÍA SEIS
Nuestro día empezó muy temprano, cogimos el ferry a la isla de Porto Santo, el trayecto dura dos horas y media ida, otras dos y media vuelta, en mi opinión merece la pena cada segundo del viaje. Si tienes suerte, puedes avistar delfines y ballenas, en cualquier caso podrás disfrutar de la costa de Madeira, que es sencillamente preciosa (y a la vuelta de una puesta de sol preciosa). Es posible cruzar a Porto Santo con vuestro coche, si bien nosotras decidimos dejarlo en tierra y alquilar uno a nuestra llegada a la isla, ya que nos salía más económico. También puede cogerse un bus turístico, pero como sabéis la libertad de tu propio coche no te la da la ruta del autobús. Recorrimos los puntos más emblemáticos de la isla (es muy pequeñita, en una media hora se cruza de extremo a extremo) y disfrutamos de su increíble playa, que se va directa a mi ranking de playas favoritas en el mundo. De aguas cristalinas y arena dorada pero muy fina (nada que ver con las playas de Madeira). Fue un día muy completo y maravilloso.
DÍA SIETE
Nuestro último día en la isla lo dedicamos, antes de ir al aeropuerto, a visitar la última zona que nos quedaba pendiente, Monte (la zona alta de Funchal). Visitamos su iglesia, nos montamos en los famosos carreiros do Monte (fue divertido, aunque estaría genial que durase un poco más y que ofrecieran algún servicio para subir de nuevo al punto de partida, tuvimos que coger un taxi y el precio fueron unos 15 euros) y recorrimos el famoso jardín tropical Monte Palace, donde descubrimos muchas especies de flora y fauna exóticas aunque yo, sin duda, me quedo con la emoción de haber visto flamencos, me encantó!!
Y con esto finalizó nuestro viaje por Madeira, en mi opinión siete días es tiempo suficiente para llevarse una idea bastante buena de la isla, si vais a realizar el viaje, al menos disponed de cinco días, de lo contrario se os quedarán demasiadas cosas por ver.
Espero que os sirva!
Muchos besos!
@ccpetiterobe
When I told you that this summer had turned out very Portuguese, I wasn’t lying.
I put the finishing touch to the summer with this post about our trip to Madeira, a one-week road trip around the Portuguese island. As a preview, after a great summer, comes a promising (very promising) start to autumn, with a great trip that has been on my bucket list for years, so follow me so you don’t miss anything.
I am going to structure the post about Madeira based on our itinerary, to give you all the information in the most detailed way possible. We were on the island for a total of six nights, which we divided into three different areas of the island.
To explore it calmly, at our own pace and reach the last corners, we chose to rent a car (you know it is my favorite option) with Move Rent a Car. The service was simply incredible, they were waiting for us in the arrivals area of the airport. We had an SUV type car (essential, we would not have been able to access some areas of the island with another type of car), very new and the entire team was very friendly (they gave us many recommendations about the island). As always, I recommend you take out comprehensive insurance, to enjoy your trips with total freedom! At the time of leaving, we left our car again at the airport where the Move Rent a Car team picked it up (they also gave us all the facilities for the return), if we return we would definitely repeat with them.
ITINERARY ONE WEEK IN MADEIRA
DAY ONE
Our first two nights on the island were spent in the northern area, we arrived very early in the morning, and after recovering a little we began our Portuguese adventure visiting Seixal, Porto Moniz (with its natural pools), the bridal veil waterfall and Ribeira Janela.
The natural pools cost three euros per adult, inside you will find showers and changing rooms, the water is cold, but not excessively cold, there are plenty of small fish and a very fun breakwater! In Seixal we found by chance a place to eat, of high quality and better views called Praia da Laje. For dinner we stopped in the town of San Vicente.
DAY TWO
We toured the entire eastern part of the island, starting with the furthest area, Caniço, reaching Punta de San Lorenzo, a truly recommendable place, reddish cliffs and beautiful views over the sea.
Porto da Cruz, Guindaste viewpoint and from there to our next stop, one of the most iconic sights of Madeira, the traditional houses of Santana. This day we were not very lucky with the weather, and although we entered the Caldeirao Verde Levada due to the time and the weather, we were not able to explore it.
DAY THREE
This day we got up early to do the first nature route of the trip. We climbed to Ruivo peak (the highest in Madeira), in our case we drove to Achada do Teixeira, from there the route is linear, the round trip is just under 6km. It isn’t an excessively hard route, although it has quite uphill and downhill areas, the most «annoying» thing is the weather, generally quite foggy, with wind and even some rain at times. Luckily when we reached the peak the fog dissipated at times and we were able to contemplate the incredible views.
At lunchtime we were back in the car and headed to Funchal, where we spent the next two nights. That day in the afternoon we took the opportunity to walk around Funchal without rushing, allowing ourselves to be surprised by its streets and its street art.
DAY FOUR
We woke up without a rush, since the night before we had been enjoying the Madeiran party, in addition to having climbed the highest peak on the island, and we dedicated the first half of the day to visiting the outstanding places in Funchal. You can’t miss the Ritz café, the market, the squares of the old town, the streets full of street art and the fortress (if it’s at sunset, the better).
After eating we drove to the Faja dos Padres viewpoint, where we descended an impressive slope in a cable car. Below a huge banana plantation and the beach, it was a very fun excursion. From here we continue to Ponta do Sol and, following the old E31 road, we reach one of the most famous waterfalls on the island, one that falls on the road and soaks the cars (and people) who dare to cross it. We returned to Funchal to buy some souvenirs, have dinner and visit the Madeira casino (if you have time the entrance is free, although there is nothing notable either, and the staff was not too kind to us, to be honest).
DAY FIVE
The second route that we decided to do on our trip to Madeira was a part of the Reina route (or peak to peak), its a route that connects two of the highest peaks on the island, Ruivo with Areiro. Areiro peak «can be reached by car» (this is the theory, although due to the influx of people, or for hiker visits you will have to park about 800 m before arriving – which you will have to go up and then down – which you will have to add to the route.
The Reina route is much more demanding, also linear, and just over 11 km round trip. We chose to walk about 2km, specifically to the Pedro Rija viewpoint (you will see a sign), this area is known because there are some stairs on a narrow slope, which makes it seem like you are walking through clouds (especially if you have a drone).
Once we finished the excursion we headed to our last hotel, in the Cámara de Lobos area, the Hotel Bio Quinta da Serra. It’s a hotel on a hill, with beautiful views of the sea and the bay, a haven of peace that helped us recharge our batteries the last two nights. The afternoon we arrived we decided to stay enjoying the hotel, the views, the indoor pool with its jacuzzi, sauna area… they also have a gym and an outdoor hammock area. They invited us to a complimentary drink and, as it could not be otherwise, my favorite part was the breakfast, super varied, with great quality and wonderful views.
After refueling at Quinta da Serra, we went to the Cabo Girao viewpoint (entrance costs 2 euros and closes – at least at this time of year – at 8:00 p.m.). It’s a glass viewpoint 580 meters above the sea. We had dinner at Cámara de Lobos and took the opportunity to enjoy its nighttime atmosphere, which we liked much more than the daytime atmosphere.
DAY SIX
Our day started very early, we took the ferry to the island of Porto Santo, the journey takes two and a half hours one way, another two and a half return, in my opinion it’s worth every second of the trip. If you’re lucky, you can spot dolphins and whales, in any case you can enjoy the coast of Madeira, which is simply beautiful (and just around the corner from a beautiful sunset).
It’s possible to cross to Porto Santo with your car, although we decided to leave it on land and rent one upon our arrival on the island, since it was cheaper. You can also take a tourist bus, but as you know, the bus route doesn’t give you the freedom of your own car. We visited the most emblematic points of the island (it’s very small, in half an hour you can cross it from end to end) and we enjoyed its incredible beach, which goes straight to my ranking of favorite beaches in the world. With crystal clear waters and golden but very fine sand (nothing to do with the beaches of Madeira). It was a very complete and wonderful day.
SEVENTH DAY
Our last day on the island was dedicated, before going to the airport, to visiting the last area we had left, Monte (the upper area of Funchal). We visited their church, we rode the famous carreiros do Monte (it was fun, although it would be great if it lasted a little longer and if they offered some service to get back up to the starting point, we had to take a taxi and the price was about 15 euros ) and we visited the famous Monte Palace tropical garden, where we discovered many species of exotic flora and fauna although I, without a doubt, am left with the emotion of having seen flamingos, I loved it!!
And with this our trip to Madeira ended, in my opinion seven days is enough time to get a pretty good idea of the island, if you are going to make the trip, at least have five days, otherwise you will have too miss many things.
I hope it helps you!
Lots of kisses!
@ccpetiterobe